Opinión
Esta fábula nos enseña que si algún día llegamos a pasar por
una situación difícil debemos tener paciencia y fe en Dios que las cosas se van
a solucionar. No debemos maldecir nuestra suerte porque lo único que pasará
será tener más problemas y no los podremos resolver nunca. En esta fábula el
anciano se equivocó al estar llamando a la muerte y cuando se le presentó el
prefirió la vida por sobre todas las cosas. Hay que darnos cuenta que la vida
es lo más hermoso que Dios nos ha dado, hay disfrutarla cada día, los dolores
pasan pero nuestra vida es única y muy preciada.
Yo pienso que la esperanza es lo último que se pierde, y más
si pasamos por una difícil situación hay que ser fuertes levantar la cabeza y
seguir adelante. Porque Dios nunca abandona a sus ciervos.