Opinión
Esta pequeña historia me gusto demasiado porque nos relata
que es muy común en nuestra sociedad como lo son las personas que se hacen
pasar por otras personas ya sea para llamar la atención o porque se sienten
solas, yo pienso que a veces las personas utilizan este método para sentirse
más importante ante la sociedad ya que en algunos acasos no los toman enserio.
Pero esa no es la mejor opción ya que una farsa de este tamaño no se puede
sostener para siempre y en algún momento alguien va descubrir esto y puede
pasar a mayores, un claro ejemplo pueden ser los homosexuales que al no
estar contentos con su apariencia o con su personalidad deciden cambiar de
género y ser otras personas, lo cual en esta época es algo que muchas perronas
lo castigan con la muerte
La moraleja que me deja este corto pero grandioso libro es
que nunca debemos aparentar ser otra persona debido a que esa farsa no dura
toda la vida y el día que se descubra eso se le puede venir el mundo y ya no
tendremos salida, yo pienso que todas las personas deben sentirse orgullosas de
ser quien son ya que Dios creo a cada persona con una personalidad y una vocación diferente.